A 15 años de la Misión Cultural Logosófica en Europa

Corría el año 1992, conmemoración de los 500 años del arribo de Colón en América, cuando llegó a la Fundación Logosófica del Uruguay la iniciativa de realizar una misión cultural de divulgación de la enseñanza logosófica en Portugal y España, organizada por la Fundación Logosófica de Brasil.

Formar parte de esa embajada cultural integrada por miembros de Argentina, Uruguay, Brasil e Israel, fue un honor y una hermosa oportunidad para los 40 participantes, cumpliéndose un intenso programa en Lisboa, Porto, Barcelona y Madrid, en el período del 17 al 30 de octubre de 1992.

Una síntesis de las actividades realizadas puede poner al alcance del lector parte de la labor que se llevó a cabo:

  • 6 conferencias públicas: una en Portugal, dos en Barcelona y tres en Madrid.
  • 15 conferencias de prensa, incluyendo mesas redondas, entrevistas e invitaciones a redacciones
  • 25 reuniones informativas en universidades, instituciones culturales y educativas, órganos gubernamentales y embajadas
  • 700 libros y 700 revistas y cientos de afiches distribuidos dando cuenta de los eventos

El movimiento, preparado con antelación y en el propio suelo europeo, fue tomando fuerza en forma gradual, sintiéndonos todos envueltos en la alegría y el entusiasmo colectivos, lo cual nos permitió comprobar la ley universal de movimiento: a mayor intensidad de movimientos, mayor estabilidad y equilibrio.

Sin embargo no fue fácil trasmitir dicho pensamiento en Euroopa, donde muchas mentes estaban prevenidas desfavorablemente frente a una corriente de pensamiento que no es europea.

¿Qué podrá Logosofía decir que ya no haya sido dicho?
¿Qué puede traer de nuevo? – se preguntaban.

Para responder es importante contar no sólo con el propio acervo y las propias convicciones, sino poder apoyarse en las experiencias y comprobaciones del conjunto; de ahí la importancia del trabajo en equipo.

La coordinadora general, Dra. Lúcia Lima, de Belo Horizonte, Brasil, fue la encargada de distribuir la acción de los 9 equipos en cada ciudad visitada.

En Lisboa, la delegación en pleno, visitó la Asamblea Legislativa en la que fue recibida por dos diputados. Otro tanto hizo la Embajada de Brasil, donde el embajador dialogó amable y entusiastamente con los visitantes.

Mientras se sucedían las visitas y reuniones en Lisboa con mesas redondas periodísticas, conferencias en la Casa de Brasil, audiencia en la Secretaría de las Comunidades Portuguesas del Palacio de Gobierno, etc., otra delegación se movía en Porto. Allí se visitó la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios –ANJE-, la Cámara de Porto, la Biblioteca Municipal, la Fundación de la Juventud, el Palacio de la Bolsa, además de radios y periódicos varios.

Reunidos todos en Barcelona, fuimos cálidamente acogidos por el matrimonio de estudiantes argentinos Ángel Aisa y Ana María Siri. Se reitera en esa ciudad la recorrida por los medios de prensa, Embajadas y Facultades, llevando a todas ellas información sobre los objetivos y aspectos prominentes del conocimiento logosófico.

En el Ateneo Barcelonés, una de las más prestigiosas instituciones culturales de España desde su fundación en 1860, disertó el arquitecto Liliano Livi, por entonces Rector de la Filial Córdoba de Argentina, siendo presentado por el catedrático de la Universidad de Barcelona, el profesor Francisco Munuera, quien vertió acertados conceptos sobre esta ciencia con la que estaba tomando contacto por vez primera.

El tema de la conferencia fue: “América, 500 años después, en el pensamiento y obra de Carlos Bernardo González Pecotche” y en su desarrollo el arquitecto enfocó múltiples aspectos de la Logosofía como nueva cultura para la humanidad.

Momentos particularmente emotivos fueron vividos en la Biblioteca de Cataluña, donde se oficializó la existencia previa de la bibliografía logosófica en el acervo de la institución, la que abarca la literatura universal en más de 1,5 millones de ejemplares. La delegación fue recibida en el auditorio principal de la Biblioteca por su director el profesor Joseph Razquin i Jené, leyéndose entonces un fragmento traducido al catalán del libro “Introducción al Conocimiento Logosófico”.

Acto seguido se entregó una placa con la siguiente inscripción:
“Fundación Logosófica – Ciencia de la Vida creada por el pensador argentino Carlos Bernardo González Pecotche – Homenaje a la Biblioteca de Catalunya recipiendaria de la Bibliografía Logosófica – Octubre 1992-“
“América, 500 años después: ¿Qué hay por descubrir?”

Finalmente en Madrid se dictaron 3 conferencias en el ámbito de la Ciudad Universitaria, auditorio Casa de Brasil, con el tema:

“América, 500 años después: ¿Qué hay por descubrir?”

El prestigioso diario español “Diario 16” dio amplia cobertura a las actividades desarrolladas por la Misión Cultural en Madrid, divulgando también la realización de las conferencias.

Culminó allí, en Madrid, esa misión cultural, apodada coloquialmente como “La Caravana” que llevó la Logosofía al viejo mundo, sintiendo sus integrantes que se abría una nueva etapa en aquel continente.

Un resultado

Un año después de la Misión Cultural, en 1993 se inaugura en Barcelona el primer Centro de Estudios Logosóficos en suelo europeo. Este Centro cuenta hoy con una hermosa sede en un punto céntrico, y un valioso conjunto de estudiosos de esta nueva ciencia que coordina acciones con todos quienes estudian Logosofía en Europa e Israel.

En octubre de 2006, este Centro de Estudios Logosóficos en Barcelona, organizó el II Encuentro de Estudiantes de “La Logosofía responde: el avance hacia las altas regiones del entendimiento…»,  reuniendo a 146 delegados de todo el mundo.

Logosofía recoge la pregunta muchas veces impronunciada, y que particularmente sentimos en aquella Misión Cultural: ¿Qué queda por hacer a las generaciones de hoy?

En el libro “Introducción al Conocimiento Logosófico” se expresa lo siguiente:

“La Logosofía responde: Queda lo más grande que existe por realizar y que, en esta gran etapa, tendrán que cumplir las generaciones de hoy y las venideras: el avance hacia las altas regiones del entendimiento; el esfuerzo por llevar al ser, como alma humana, hacia el encuentro de su propia explicación como ente físico, hacia la eternidad que no ha sabido comprender al vivir un tiempo perentorio, sin valor alguno. En otras palabras: el avance hacia la superación”.