Una explicación sobre el método logosófico
A duras penas entendí (tengo más de 3 mil libros, sin contar los que ya he leído) que, en cualquier ciencia leer extensivamente puede tornar a alguien en un erudito, pero solamente el contacto con la realidad transforma la teoría en conocimiento y permite al ser obtener el saber.
«Un poderoso conocimiento: La Confianza en sí Mismo»
Reseña de la conferencia con el título aludido dictada el 26 de mayo de 2010 por el Sr. Jorge Dusio Caviglia en la filial de Montevideo de la Fundación Logosófica del Uruguay. Dejamos un extracto de 5 minutos en video y un artículo debajo del mismo con contenidos adicionales.
Exposición en Rotary de Solymar
Gonzalez Pecotche nació en Buenos Aires en 1901 y vivió hasta 1963. Desde muy joven su espiritu inquieto lo movió a buscar e investigar todo lo concerniente a la vida y destino del hombre con relación al futuro de la humanidad. Le preocupaba con profundidad el rumbo que estaba tomando el mundo, la decadencia moral, la incomprensión humana que llevaba a las guerras y la gran desorientación espiritual que ninguna doctrina filosófica, religiosa ni científica lograba encauzar.
Los milenarios interrogantes filosóficos, de dónde venimos, para qué estamos y a dónde vamos, estaban lejos de ser respondidos con elementos que indicaran un rumbo sensato y firme, lejos de darnos un punto de apoyo que la razón y la sensibilidad pudieran usar para elevar la conducta y la moral, forjando de esa forma una humanidad más responsable y feliz.
Luego de profundas observaciones e investigaciones en la naturaleza humana, sus condiciones y posibilidades mentales, morales y espirituales, halla las claves por sí mismo, valido de su propia herencia espiritual y saber. Encuentra la veta de conocimientos fecundos, potentes, que habían sido orillados pero pasado por alto por los pensadores antiguos y modernos. Nace así una nueva concepción del hombre, del universo y de las leyes que rigen todos los procesos inteligentes de la creación.
Caminando y algo más
Formo parte además de otro conjunto humano, el de los seres que siempre estamos atentos a la hora en que se producirá la puesta del sol, para evaluar la posibilidad de presenciarla y disfrutarla. Nuestro querido Montevideo, tiene el privilegio de contar con una costa cuya orientación le permite en verano, ver la salida y la puesta del sol en el agua.
Cierto día estival hace ya unos años, al finalizar la jornada laboral me propuse como dice el dicho popular “matar dos pájaros de un tiro”. En este caso le asignamos a esta expresión una interpretación especial diciendo “dar vida a dos placeres en un solo acto”, para referirnos al hecho de salir a caminar, con la expresa intención de ver la puesta del sol.
El gran problema pedagógico
Sin que se desconozcan los aportes realizados en las últimas décadas por investigadores del área pedagógica y el redescubrimiento de otros anteriores que se habían pasado por alto y subestimado, existe a nivel mundial una gran preocupación, un gran problema pedagógico aún no resuelto.
Esa preocupación se manifiesta en la desorientación implícita en los continuos ensayos y cambios de planes, así como en el devenir constante de teorías educativas, las que no satisfacen las expectativas de quienes observan los magros resultados obtenidos.
Gestionando los recuerdos
Recordar es, de alguna manera, revivir instancias del pasado. Pero las imágenes que el recuerdo evoca no siempre reproducen con fidelidad lo anteriormente vivido. Ocurre además que si no es el mismo ser quien pone a funcionar esa facultad mental, los efectos pueden ser diferentes a los queridos.
Cabe preguntarse por qué a veces los tiempos que vuelven del pasado llegan lozanos y traen ráfagas de energía cuando, en otros, la presencia de los mismos sucesos producen nostalgia o pesar.